Portafolis

“A flor de piel”. Un sistema nervioso altamente sensible.

Marta Lanuza

Todos sienten, pero no sienten igual.

Escuchando un directo de @sensiblemente.pas y @helenanualart_ hace unas semanas, no pude evitar quedarme con la metáfora que compartieron sobre que las PAS tenemos un colador con malla de agujeros más grandes, que permite que nos entre mucho más de fuera a dentro. Sentía deber ponerle imagen a aquello.

Es revelador. No es que los demás no sientan (nadie lo niega), es que a través de nuestro filtro entra mucho más. Y ese de más, circula por nuestro sistema nervioso que enseguida hace que nos brote dentro nuestro, miles de sensaciones y emociones a flor de piel; por todo el cuerpo. Una delicia muchas veces, una sensación abrumadora muchas otras.

Y yo no paro de preguntarme. Se califica como un rasgo de personalidad como bien explican en @pas.espana también. Y creo, que no es del todo desacertado, porque al final se ha convertido en algo parte de mí, de mi manera de ser, de actuar, de sentir e incluso de mi manera de tomar decisiones.

Pero oye, ser amable también es personalidad y es algo más bien químico y/o educacional. No es físico. No lo regula, controla, ni altera el sistema nervioso.

Ser amable se elige, se aprende. Ser PAS se nace, no se elige. Aunque sí se aprende. Se aprende a regularlo, a valorarlo y a no rechazarlo. A poder abrirte a ello y darte cuenta de las maravillosas experiencias extrasensoriales que te puede brindar la alta sensibilidad.

Pero claro, mi pregunta es: ¿estamos hablando realmente de un rasgo de personalidad o se trata de otra cosa?

Para ver y saber más sobre este proyecto, visita mi web: www.mempathie.com